Es hora de pepasar el pensamiento del Gral. Juan Domingo Perón en este momento difísi que está atravezando nuestro continente suramericano, cuando como aves de rapiña se apresta el poder anglo norteamericano listos para apropiarse de nuestros recursos:
DEFENSA NACIONAL
Transcribimos algunos párrafos de la Conferencia "La Defensa Nacional" dictada por el Cnl. Juan Domingo Perón el 10 de Junio de 1944 en la Universidad Nacional de La Plata.
"Las dos palabras, "Defensa Nacional", pueden hacer pensar a algunos espíritus que se trata de un problema cuyo planteo y solución incumbe únicamente a las FFAA de una nación. La realidad es bien distinta: en su solución entran en juego todos sus habitantes, todas sus energías, todas sus riquezas, todas sus industrias y producciones más diversas, todos sus medios de transporte y vías de comunicación, etc., siendo sus FFAA únicamente como luego veremos en el curso de la exposición, el instrumento de lucha de ese gran conjunto que constituye "la nación en armas".
(...) "Si se quiere la paz, el mejor medio de conservarla es prepararse para la guerra" . (...) "El mundo puede ser separado en dos grupos: satisfechos e insatisfechos . Los primeros todo lo poseen y nada necesitan y sus pueblos tienen la felicidad asegurada, en mayor o menor grado. A los segundos algo les falta para satisfacer sus necesidades; mercados donde colocar sus productos, materias primas que elaborar, substancias alimenticias en cantidad suficiente, un papel político que jugar con relación a su potencialidad, etc. Las naciones satisfechas, son pacifistas y no desean exponer a los azares de la guerra la felicidad que gozan. Las insatisfechas, si la política no les procura lo que ambicionan, no temerán ir a la guerra para lograrlo".
(...) "Las primeras, aferradas a la idea de paz inalterable, porque mucho la desean, generalmente descuidan su preparación para la guerra y no gastan lo que es necesario para conservar la felicidad de su pueblo. Las segundas, sabiendo que la guerra es probable, por cuanto si no tienen pacíficamente lo que desean, recurrirán a ella, ahorraran miseria de la miseria y se preparan en forma acabada para sostenerla y en un momento determinado, pueden superar a las naciones más ricas y poderosas". (...) "Tenemos así, naciones pacifistas y naciones agresoras . La guerra es un hecho social inevitable entre satisfechos e insatisfechos".
(...) "La preparación de la Defensa Nacional es una obra de aliento y requiere un constante esfuerzo realizado durante largos años ; la guerra es un problema tan variado y complejo, que dejar librada a la improvisación en el momento en que ella se presente, significaría seguir esa política suicida que tanto criticamos".
(...) "Hoy los pueblos disponen de su destino. Ellos labran su propia fortuna o su ruina. Es natural que ellos en conjunto defiendan lo que cada uno por igual ama y le interesa defender de la patria y su patrimonio". (...) "En época de los ejércitos profesionales y mercenarios, los pueblos no participaban de las contiendas, sino a través de fuertes contribuciones para solventarlos, o devastaciones que dejaban tras de sí los ejércitos en lucha. Una gran parte de la población no la sufría y, a veces, hasta la ignoraba. Las guerras de la revolución francesa, y más tarde de Napoleón, afectaron ya al pueblo francés, por la contribución en material humano que le impusieron. Es recién la guerra mundial de 1914-18, la que muestra las naciones participantes tendidas a un esfuerzo máximo para conseguir la victoria. La guerra se juega en los campos de batalla, en los mares, en el aire, en lo político, económico, financiero, industrial y se especula hasta con el hambre de las naciones enemigas".
(...) "Ya no bastan generales y almirantes geniales, con ejércitos y flotas eficientes para conquistar la victoria. A su lado, los representantes de todas las energías de la nación, tienen un rol importante que jugar en la dirección de la guerra y muchas veces son los que orientan la conducción de las operaciones de las FFAA, pero aun en los años 1914-18, detrás de los ejércitos en lucha, entregadas a un constante esfuerzo para mantener la potencia combativa de las FFAA, vivían en una relativa tranquilidad y bienestar".
(...) "La moral de la nación se mantenía en base de éxitos obtenidos en los campos de batalla, hábilmente explotados por una inteligente propaganda. La actual contienda, con el considerable progreso técnico de la aviación, nos muestra la expresión más acabada de Nación en Armas. Los pueblos de las naciones en lucha, no se encuentran ya a cubierto contra las actividades bélicas, dado que poderosas formaciones aéreas siembran la destrucción siembran la destrucción y la muerte en poblaciones mas o menos indefensas, buscando minar su moral y destruir las fuentes del potencial de guerra de la nación enemiga. El panfleto, toma un lugar importante al lado de las tremendas bombas incendiarias y explosivas, en la carga de los poderosos aviones de bombardeo".
(...) "Un país en lucha puede representarse como un arco con su correspondiente flecha, tendido al máximo que permite la resistencia de su cuerda y la elasticidad de su madero y apuntando a un solo objetivo, ganar la guerra. Sus FFAA están representadas por la piedra o el metal que constituye la punta de la flecha, pero el resto de esta, la cuerda y el arco, son la nación toda hasta la última expresión de su energía y poderío"
(...) "En consecuencia no es suficiente que los integrantes de las FFAA nos esforcemos en preparar el instrumento de lucha ; en estudiar y comprender la guerra, deduciendo enseñanzas de las diferentes contiendas que han asolado al mundo. Es además necesario que todos los intelectos de la nación, cada uno en el aspecto que interesa a sus actividades, se esfuerce también en conocerla, estudiarla y comprenderla , como única forma de llegar a esa solución integral del problema que puede presentársenos y tendremos que resolver, si un día Dios decide que la guerra haga sonar el clarín en las márgenes del Plata".
(...) "La organización de la Defensa Nacional de un país, es una vasta y completa tarea de años y años , por medio de la cual, se han de ejecutar una serie de medidas preparatorias durante la paz, para crear a las FFAA las mejores condiciones para conquistar el éxito en una contienda que pueda suceder; se formularan una serie de previsiones para que la Nación pueda adquirir y mantener ese ritmo de producción y sacrificio que nos impone la guerra, al mismo tiempo que se preverá el mejor empleo a dar a sus FFAA"
(...) "Cualquier país del mundo, grande o pequeño, débil o poderoso, con un grado elevado o reducido de civilización, posee objetivo político determinado. El objetivo político es la necesidad o ambición de un bien, que un Estado tiende a mantener o conquistar, para perfeccionar o engrandecer. El objetivo político puede ser de cualquier tipo; reivindicación o expansión territorial, hegemonía política o económica, adquisición de mercados u otras ventajas comerciales, imposiciones sociales o espirituales, etc. Los objetivos políticos de las naciones son una consecuencia directa del sentir de sus pueblos y debemos recordar que ellos tienen ese instinto seguro, que en la consideración de los grandes problemas, los orientaran siempre hacia lo que más le conviene".
(...) "La verdadera sabiduría de los pueblos y el buen juicio de los gobernantes consiste, precisamente en no fijarse un objetivo político desorbitado, que no guarde relación con la potencialidad de la nación, lo que en caso contrario lo obligaría a enfrentarse con un enemigo tan poderoso que, no solo tendría que renunciar a sus aspiraciones, sino a perder parte de su patrimonio".
(...) "También es verdad que a las naciones les llegan en su historia horas cruciales en las que deben defender su riqueza o su honor, deben sostener la lucha sin esperanza de triunfo, porque como lo enseñaron nuestros padres de la Independencia, "mas vale morir que vivir esclavos". (...) "La diplomacia debe actuar en forma similar a la conducción de una guerra. Como ella, posee sus fuerzas, sus armas y debe librar las batallas que sean necesarias para conquistar los objetivos que la política le ha fijado. Si la política logra que la diplomacia obtenga el objetivo trazado su tarea se reduce a ello y termina allí, en lo que a ese objetivo se refiere. Si la diplomacia no puede lograr el objetivo político fijado, entonces es encargada de preparar las mejores condiciones para obtenerlo por la fuerza, siempre que la situación haga ver como necesario el empleo de este medio político extremo".
(...) "Las naciones tienen la obligación de preparar la máxima potencialidad militar que su población y riqueza permitan, para poder presentarla en los campos de batalla si la guerra llama a sus puertas. Los pueblos que han descuidado la preparación de sus FFAA, han pagado siempre caro su error desapareciendo de la historia, o cayendo en las más abyectas servidumbres. De ellos la historia solo se ocupa de recordar su excesivo mercantilismo o los arqueólogos para explorar sus ruinas, descubriendo bellas muestras de una grandiosa civilización pretérita, que no supo cultivar las virtudes guerrera de sus pueblos. La preparación de las FFAA para la guerra, no es tarea fácil ni que puede improvisarse en los momentos de peligro".
(...) "Adecuada preparación de las reservas . La formación de reservas instruidas, sobre todo, hoy en que los medios de lucha han experimentado tantos progresos y complicaciones técnicas, requiere un trabajo largo y metódico, para que estas adquieran la madurez y el temple que exige la guerra".
(...) "El arte militar sufre tantas variaciones, que los cuadros permanentes del ejercito, deben entregarse a un constante trabajo y estudio, que cuando la guerra se avecina no hay tiempo de asimilar. El militar, junto a su ciencia, debe reunir condiciones de espíritu y carácter de conductor, para llevar a su tropa a los mayores sacrificios y eso no se improvisa, sino que se logra con el ejercicio constante del arte de mandar. Las armas, municiones y otros medios de lucha, no se pueden adquirir ni fabricar en el momento en que el peligro nos apremia, ya que no se encuentra disponibilidad en los mercados productores, sino que es necesario encarar fabricaciones que exigen largo tiempo.
En los arsenales y depósitos, es necesario disponer de todo lo que exigirán las primeras operaciones y prever su aumento y reposición. Las previsiones para el empleo de las FFAA de la Nación, son una larga y constante tarea que requiere de cierto número de jefes y oficiales, estudios especializados, que se inician en las Escuelas Superiores de Guerra y continúan después ininterrumpidamente en una vida de constante perfeccionamiento profesional".
(...) "El conjunto de estas previsiones contenidas en el plan militar, que coordina los planes de operaciones del Ejército, la Marina y la Aviación, se realiza sobre estudios bases que exigen conocimientos profesionales muy profundos. En dicho plan se resuelve la movilización total del país ; la forma en que serán protegidas las fronteras; la concentración de fuerzas en las probables zonas de operaciones; el probable desarrollo de las operaciones iniciales; el desarrollo del abastecimiento de las FFAA de toda suerte de elementos; el desenvolvimiento general de los medios de transporte y de comunicación del país; la defensa terrestre y antiaérea del interior".
(...) "Como podéis apreciar, esta obra realizada en forma completa y detallada, absorbe la labor constante de los organismos directivos de las FFAA de las naciones y de la exactitud de las mismas, depende en gran parte que la lucha pueda iniciarse y continuar luego en las mejores condiciones posibles. Si la guerra, llega será la habilidad y el carácter del Comandante en Jefe y las virtudes guerreras de sus fuerzas, las que trataran de inclinar el azar de la guerra a su favor, y no me refiero a la ayuda de Dios porque ambos contendientes la imploraran con igual fervor. Las FFAA de nuestra Patria, realizan en este sentido una labor silenciosa y constante, que se inicia en cuarteles de las unidades de tropas, buques de la armada y bases aéreas, preparando dentro de sus posibilidades el mejor instrumento de lucha y continua luego en sus institutos de estudios superiores para terminar en la labor directiva de sus Estados Mayores".
(...) "La política interna tiene gran importancia en la preparación del país para la guerra. Su misión es clara y sencilla, pero difícil de lograr. Debe procurar a las FFAA el máximo posible de hombres sanos y fuertes, de elevada moral y con gran espíritu de patria, con la educación necesaria que exige la guerra moderna para manejar armas cada vez más complejas. Con esta levadura, las FFAA podrán reafirmar estas virtudes y desarrollar fácilmente su alto espíritu guerrero y de sacrificio. Es necesario que las calidades antes citadas sean desarrolladas en toda la población sin excepción, dado que es en el interior del país donde las FFAA encuentran su fuerza moral y voluntad de vencer y la reposición del personal, material y elementos desgastados o perdidos".
(...) "Mantenimiento de la moral popular . Los países hoy en lucha, nos muestran todos los esfuerzos que se realizan para mantener en el pueblo, aun en momentos de mayores sacrificios y penurias, la voluntad inquebrantable de vencer al mismo tiempo que se desarrollan todas las actividades imaginables para minar la moral del adversario, naciendo así un nuevo medio de lucha, "la guerra de nervios". Si en cuestiones de gobierno, problemas económicos, sociales, financieros, industriales, de producción y de trabajo, etc. cabe toda suerte de opiniones e intereses dentro de un Estado en el objetivo político derivado del sentir de la nacionalidad de ese pueblo, por ser única e indivisible, no cabe opiniones divergentes. Por el contrario, esa mística común sirve como un aglutinante más, para cimentar la unidad nacional de un pueblo determinado".
(...) "Tregua en las luchas internas . Ante el peligro de guerra, es necesario establecer una tregua en todos los problemas y luchas interiores; sean políticos, económicos, sociales o de cualquier otro orden, para perseguir únicamente el objetivo que encierra la salvación de la Patria: ganar la guerra. Hemos visto como los pueblos que se han exacerbado en sus luchas intestinas, llevan su ceguedad hasta el extremo de declarar enemigos a sus hermanos de sangre y llamar en su auxilio a regímenes o ideologías extranjeras, o se han deshecho en luchas encarnizadas o han caído en el más abyecto vasallaje . Cuando el peligro de guerra se hace presente y durante el desarrollo de la misma, la acción de la política interna de los estados debe aumentar notablemente sus actividades, porque son muy importantes las tareas que le tocan realizar; es necesario dar popularidad a la contienda que se avecina; se debe establecer una verdadera solidaridad social, política y económica, la moral y el espíritu de lucha de la nación toda debe ser llevado a un grado tal que ningún desastre ni sacrificio la pueda abatir; desarrollar en la población un severo sentido de disciplina y responsabilidad individual, para contribuir en cualquier forma a ganar la guerra ; es necesario organizar una fuerte máquina capaz de desarrollar un adecuado plan de propaganda, contra propaganda y censura, que ponga a cubierto al frente interior, contra los ataques que el enemigo le llevara constantemente ; debe aprestarse a la población civil para que se establezca por si misma la defensa antiaérea pasiva en todo el territorio de la Nación, como único medio de limitar los daños y destrucciones de los bombardeos enemigos, etc."
(...) " El caos en las naciones vencidas. Terminada la guerra aún tiene la política interna una ímproba tarea que realizar, especialmente si la misma ha sido perdida. En este momento, parece como si las naciones integras, que han vivido varios años con sus nervios sometidos a una constante tensión, desataran de pronto todos sus instintos y bajas pasiones, creando problemas y situaciones que amenazan hasta la constitución misma de los estados. Rusia y Alemania a la terminación de la guerra 1914-18 constituyen la suficiente demostración de esta afirmación. Esta obra política interna, debe ser realizada desde la paz, en todos los ámbitos. Para lograrla, la inician los padres en los hogares, la siguen los maestros y profesores en las aulas, las FFAA en buques y cuarteles, los gobernantes y legisladores mediante su obra de gobierno, los intelectuales y pensadores en sus escritos, el cine, el teatro y radio en su obra educadora y publicitaria y finalmente, cada individuo de una nación en la formación de su auto formación". (...)
" Problemas internos argentinos . Referido este problema a nuestro caso particular, llegaremos fácil a la comprobación de que requiere un estudio y dedicación muy especial. En nuestra lucha por la independencia y en guerras exteriores que hemos sostenido , sin asumir el carácter de nación en armas que hemos definido, podemos observar grietas lamentables en el frente interno , que nos obligan a ser precavidos y previsores. Posteriormente, hemos ofrecido al mundo un litoral abierto a todos los individuos, razas, ideologías, culturas, idiomas y religiones. Sin duda; la Nación se ha engrandecido, pero existe el problema del cosmopolitismo con que se mantienen dentro de la Nación, núcleos poco o nada asimilados".
(...) "Todos los años un elevado porcentaje de ciudadanos, al presentarse para cumplir con su obligación de aprender a defender a la Patria, debe ser rechazados por no reunir las condiciones físicas indispensables, la mayoría de los casos originados en una niñez falta de abrigo y alimentación suficiente. Y en los textos de geografía del mundo entero se lee que somos el país de la carne y el trigo, de la lana y el cuero. Es indudable que una gran obra social debe ser realizada en el país , tenemos una excelente materia prima, pero para bien moldearla es indispensable el esfuerzo común de todos los argentinos, desde los que ocupan las más altas magistraturas del país, hasta el más modesto ciudadano. La defensa nacional es así un argumento mas, que debe incitarnos para asegurar la felicidad de nuestro pueblo".
(...) " La acción industrial . Ya la guerra 1914-18 nos mostró, y en un grado aun mayor la actual, la importancia fundamental que para el desarrollo de la guerra, asume la movilización y el máximo aprovechamiento de las industrias del país. Conocido es el rol que asumió EEUU en la anterior contienda y en la actual, en que mediante la contribución de su poderío industrial, se convierte en el arsenal de las naciones aliadas, en el máximo esfuerzo por inclinar a su favor la suerte de la guerra. Todas las naciones en la contienda, movilizan la totalidad de sus industrias y tienden con máximo rendimiento hacia un esfuerzo común para abastecer sus FFAA. Es evidente que este cambio, debe ser cuidadosamente preparado desde el tiempo de paz; solucionando problemas tales como el reemplazo de mano de obra, obtención de materia prima, conversión de industrias como consecuencia del peligro aéreo, reemplazo y reposición de lo destruido, etc.".
(...) Abastecimiento de ejércitos en marcha . Durante la guerra es necesario poner en marcha este grandioso mecanismo; regular su producción de acuerdo con las demandas especificas de las FFAA; asegurar los abastecimientos a la población civil; adquirir la producción de materias primas y productos industriales necesarios en los países extranjeros, anticipar y neutralizar las adquisiciones de los enemigos; orientar la acción de destrucción de las industrias enemigas, señalando objetivos a la aviación y al sabotaje, etc."
(...) " Industrialización de nuestro país . Referido el problema industrial al caso particular de nuestro país, podemos decir que constituye el punto crítico de nuestra defensa nacional. La causa de esta crisis hay que buscarla lejos para poder solucionarla. Durante mucho tiempo nuestra producción y riqueza ha sido de carácter casi exclusivamente agrícolas. A ello se debe en gran parte que nuestro crecimiento inmigratorio no ha sido todo lo considerable que era de esperar, dado el elevado rendimiento de esta clase de producción con relación a la mano de obra necesaria. Colmados los mercados mundiales, se limitó la producción, y por ende, la entrada al país de la mano de obra que ella necesitaba. El capital argentino, invertido así en forma segura pero poco brillante, se mostraba reacio a buscar colocación en las actividades industriales, consideradas durante mucho tiempo como una aventura descabellada y aunque parezca risible, no propia de buen señorío.
El capital extranjero se dedicó especialmente a las actividades comerciales, donde todo lucro, por rápido y descomedido que fuese, era siempre permitido y lícito; busco también seguridad en los servicios públicos o industrias madres, muchas veces con una ganancia mínima respaldada por el Estado. La economía del país, reposaba casi exclusivamente en los productos de la tierra pero en el estado más innoble de elaboración, que luego transformaba en el extranjero con evidentes beneficios para sus economías, adquiríamos de nuevo ya transformados.
El capital extranjero demostró poco interés en establecerse en el país para elaborar sus riquezas naturales, lo que significaría beneficiar nuestra economía y desarrollo en perjuicio de los suyos y entrar en competencia con los productos que seguirían allí elaborando. Esta acción recuperadora debió ser emprendida evidentemente por los capitales argentinos, o por lo menos que el Estado los incitase precediéndolos y mostrándoles el camino a seguir".
(...) " Compras bélicas en el extranjero . Para corroborarlo no me referiré más que a un aspecto. Hemos gastado en el extranjero grandes sumas de dinero en la adquisición de material de guerra. Le hemos pagado a siete veces su valor, porque siete es el coeficiente de seguridad de la industria bélica y todo ese dinero ha salido del país sin beneficio para su economía, sus industrias o la masa obrera que pudo alimentar. Una política inteligente, nos hubiera permitido montar las fábricas para hacerlos en el país, las que tendríamos en el presente, lo mismo que una considerable experiencia industrial y las sumas invertidas habrían pasado de una manos a otras, argentinas todas. Lo que digo del material de guerra, se puede hacer extensivo a maquinarias agrícolas, al material de transporte, terrestre, fluvial y marítimo y cualquier otro orden de actividad . Los técnicos argentinos se han demostrado tan capaces como los extranjeros, y si alguien cree que no lo son, traigamos a estos y pronto asimilaremos todo lo que pueden enseñarnos".
(...) " La capacidad del obrero argentino . El obrero argentino, cuando se le ha dado oportunidad de aprender, se ha revelado tanto o más capaz que el extranjero. Maquinarias, si no poseemos en cantidad o calidad suficientes, pueden fabricarse tantas como sean necesarias. A las materias primas nos las ofrecen las entrañas de nuestra tierra, que solo esperan que las extraigamos. Si no lo tenemos todo, lo adquiriremos allí donde se encuentre, haciendo lo mismo que los países europeos que tampoco lo tienen todo. La actual contienda, al hacer desaparecer casi en absoluto de nuestros mercados los productos manufacturados extranjeros, ha vuelto a hacer florecer nuestras industrias, en forma que causa admiración hasta en los piases industriales por excelencia. La teoría que mucho tiempo sostuvimos que si algún día algún peligro amenazaba a nuestra patria, encontraría en los mercados extranjeros el material de guerra que necesitásemos para completar la dotación inicial de nuestro Ejército y asegurar su reposición, ha quedado demostrada como una utopía".
(...) " Debemos poseer la industria propia. La Defensa Nacional exige una poderosa industria propia y no cualquiera sino una industria pesada. Para ello, es indudablemente necesario una acción oficial del Estado , que solucione los problemas que ya he citado y proteja a nuestras industrias si es necesario. No las artificiales que con propósitos solo utilitarios, habrán recuperado varias veces el capital invertido, sino los que dedican sus actividades a esa obra estable que contribuirá a beneficiar la economía y asegurara la defensa nacional. En este sentido, el primer paso ya ha sido dado con la creación de la Dirección General de Fabricaciones Militares, que contempla la solución de problemas neurálgicos que afecten a nuestras industrias.
Al mismo tiempo es necesario orientar la formación profesional de la juventud argentina. Que los faltos de medios o de capacidad comprendan que más que medrar en una oficina pública, se progresa en las fábricas y talleres y se gana en dignidad muchas veces. Que los que siguen carreras universitarias, sepan que las profesiones industriales les ofrecen horizontes tan amplios como el derecho, la medicina o la ingeniería en construcciones. Las escuelas industriales, de oficios y facultades de química, industrias, electrotecnia, etc., deben multiplicarse. La Defensa Nacional de nuestra patria, tiene necesidad de ellos ".
(...) " La acción comercial . El comercio, tanto exterior como interior de cualquier país, tienen una gran importancia desde el punto de vista de la Defensa Nacional. Las naciones en lucha buscan anular el comercio del adversario, no solo para impedir la llegada de abastecimientos necesarios a las FFAA, sino a la vida de la población civil y a su economía. El bloqueo inglés y la campaña submarina alemana, son una demostración en este sentido. Es necesario entonces, estudiar cuidadosamente desde tiempo de paz, condiciones particulares en que el comercio podrá desenvolverse en tiempo de guerra, para desarrollar una política comercial adecuada. En primer lugar, es necesario orientar desde la paz, las corrientes comerciales con los países que más difícilmente podrán convertirse en contendientes en una situación bélica dada, ya que siendo el comercio una de las principales fuentes de la economía y finanzas de la Nación, conviene mantenerlo a su mayor nivel compatible con la situación de guerra. Luego deben estudiarse los puertos por donde saldrán nuestros productos e ingresaran los del extranjero . Se debe determinar cuales son los susceptibles de sufrir ataques aéreos o navales, los que pueden ser bloqueados con mayor facilidad, etc., para saber cuales son los utilizables y las ampliaciones necesarias en sus instalaciones para admitir la absorción de los movimientos comerciales de los otros".
(...) " Estudio de las rutas comerciales . A continuación, habrá que considerar la forma en que dichos productos atravesaran el mar, para asegurarlos contra el ataque naval del adversario. Surge como condición óptima, la necesidad de disponer de una numerosa flota mercante propia y una poderosa marina que la defienda . Se deberá estudiar también, la posibilidad de desviar él trafico de productos a través de países neutrales o aliados, con los cuales los unan vías de comunicación terrestre, como forma de burlar el bloqueo. Análogo estudio deberá efectuarse de los puntos críticos sobre el que reposa el comercio enemigo, para atacarlo y poder así destruirlo, sea mediante el ataque directo o por la competencia de productos similares en los mercados adquisitivos, haciendo jugar todos los resortes que la política comercial posee. Lo manifestado para el comercio marítimo, debe naturalmente, ser extendido a comunicaciones terrestres y fluviales con los países continentales ".
(...) " Posibilidades y desarrollo del comercio interno . Es necesario luego extender las previsiones al desarrollo del comercio interno, asegurando una distribución adecuada, de los productos destinados a satisfacer el abastecimiento de las FFAA y de la población civil, evitando la especulación y el alza desmedida de precios. Las vías de comunicaciones terrestres (FFCC y viales) y las fluviales, deben ser cuidadosamente orientadas por una sabia política que contemple no sólo las necesidades en tiempo de paz, sino también las de guerra en forma similar al comercio marítimo . Además, habrá que considerar las necesidades de las FFAA, no solo para su abastecimiento, sino para movilización, concentración y realización de determinadas maniobras".
(...) "La acción económica. La economía de la Nación, es de importancia fundamental para el desarrollo de la guerra. Las riquezas de la Nación, son llamadas a su máxima contribución para asegurar el éxito de la misma , de calidad y continuidad de producciones existentes dependerá en alto grado la financiación de la guerra. Las posibilidades de comercio exterior, las condiciones particulares de la economía de cada país y el manejo de sus finanzas, requieren la más hábil conducción para evitar la ruina del mismo, a pesar de haber ganado la guerra".
(...) "Los consumos de productos de un país en guerra, asumen cifras fantásticas, y es necesario estimular al máximo la producción de riquezas, a pesar de que la mano de obra, las maquinarias y el utillaje, las fuentes de energía y los medios de transporte, se encuentren ya exigidos al máximo".
(...) " Transformación de la economía nacional . Es necesario, además de estudiar la realización de las propias fuentes de riqueza, coordinarlas con las regiones que se prevea conquistar o perder durante la contienda . Indudablemente, la movilización y transformación de la economía del país, con todos los intereses que habrá que vencer, las formas de explotación muchas veces antieconómicas que será necesario establecer, distribución adecuada de recursos, determinación de las importaciones indispensables y el orden de prioridad a establecer en las mismas, organización del trabajo y empleo del personal, adaptándolo a determinadas actividades, la utilización de los medios de transporte y de comunicación, etc., son tareas muy complicadas. Al igual que las cuestiones analizadas anteriormente, los países desde el tiempo de paz, tratan de someter las economías de los países probables adversarios a ciertos vasallajes y situaciones criticas, preparando verdaderas minas de tiempo que harán explosión en el momento deseado . La transformación que necesariamente debe producirse en las industrias, en la vida agropecuaria y en todos los órdenes de la producción, son de tal naturaleza que, si no se han adoptado con tiempo medidas previsoras, muy graves perturbaciones pondrán en peligro la existencia misma de los Estados. La desocupación y el derrumbe industrial y comercial, han asolado a las naciones beligerantes después de la guerra, cundiendo una desmovilización general y contagiosa".
(...) " La acción financiera . Es indudable que las finanzas sanas, desde la paz, facilitan notablemente la conducción financiera de la guerra. La existencia de reservas metálicas de divisas y un crédito exterior e interior sano, son otros tantos factores de éxito a considerar ".
(...) " Deben adoptarse las previsiones financieras . La financiación de la guerra, solo puede hacerse sobre la base de cuidadosas previsiones, formuladas desde la paz, ajustadas a las más variadas circunstancias que puedan presentarse. Será necesario efectuar una apreciación sobre el probable costo de la guerra, sobre el cual es muy fácil que nos quedemos cortos. En el establecimiento de las inversiones, habrá que extremar todas las medidas existentes, aun coercitivas; movilización de las reservas metálicas y divisas existentes - aportes voluntarios de las reservas metálicas y divisas existentes - del sistema impositivo - de la emisión del papel moneda, etc., sin consideración alguna a los intereses particulares y privados . Será también necesario realizar una guerra implacable a las finanzas de las naciones adversarias, especialmente atacando su crédito, su moneda y su sistema impositivo. Será también necesario estudiar la contribución económica y financiera que se impondrá a la nación vencida y la forma de pagar la deuda de guerra en caso de derrota".
Juan Domingo Perón
Universidad Nacional de La Plata, 10 de Junio de 1944
Fuente: http://www.causanacional.com.ar/Nuestro_pais_esta_inmerso.html
DEFENSA NACIONAL
Transcribimos algunos párrafos de la Conferencia "La Defensa Nacional" dictada por el Cnl. Juan Domingo Perón el 10 de Junio de 1944 en la Universidad Nacional de La Plata.
"Las dos palabras, "Defensa Nacional", pueden hacer pensar a algunos espíritus que se trata de un problema cuyo planteo y solución incumbe únicamente a las FFAA de una nación. La realidad es bien distinta: en su solución entran en juego todos sus habitantes, todas sus energías, todas sus riquezas, todas sus industrias y producciones más diversas, todos sus medios de transporte y vías de comunicación, etc., siendo sus FFAA únicamente como luego veremos en el curso de la exposición, el instrumento de lucha de ese gran conjunto que constituye "la nación en armas".
(...) "Si se quiere la paz, el mejor medio de conservarla es prepararse para la guerra" . (...) "El mundo puede ser separado en dos grupos: satisfechos e insatisfechos . Los primeros todo lo poseen y nada necesitan y sus pueblos tienen la felicidad asegurada, en mayor o menor grado. A los segundos algo les falta para satisfacer sus necesidades; mercados donde colocar sus productos, materias primas que elaborar, substancias alimenticias en cantidad suficiente, un papel político que jugar con relación a su potencialidad, etc. Las naciones satisfechas, son pacifistas y no desean exponer a los azares de la guerra la felicidad que gozan. Las insatisfechas, si la política no les procura lo que ambicionan, no temerán ir a la guerra para lograrlo".
(...) "Las primeras, aferradas a la idea de paz inalterable, porque mucho la desean, generalmente descuidan su preparación para la guerra y no gastan lo que es necesario para conservar la felicidad de su pueblo. Las segundas, sabiendo que la guerra es probable, por cuanto si no tienen pacíficamente lo que desean, recurrirán a ella, ahorraran miseria de la miseria y se preparan en forma acabada para sostenerla y en un momento determinado, pueden superar a las naciones más ricas y poderosas". (...) "Tenemos así, naciones pacifistas y naciones agresoras . La guerra es un hecho social inevitable entre satisfechos e insatisfechos".
(...) "La preparación de la Defensa Nacional es una obra de aliento y requiere un constante esfuerzo realizado durante largos años ; la guerra es un problema tan variado y complejo, que dejar librada a la improvisación en el momento en que ella se presente, significaría seguir esa política suicida que tanto criticamos".
(...) "Hoy los pueblos disponen de su destino. Ellos labran su propia fortuna o su ruina. Es natural que ellos en conjunto defiendan lo que cada uno por igual ama y le interesa defender de la patria y su patrimonio". (...) "En época de los ejércitos profesionales y mercenarios, los pueblos no participaban de las contiendas, sino a través de fuertes contribuciones para solventarlos, o devastaciones que dejaban tras de sí los ejércitos en lucha. Una gran parte de la población no la sufría y, a veces, hasta la ignoraba. Las guerras de la revolución francesa, y más tarde de Napoleón, afectaron ya al pueblo francés, por la contribución en material humano que le impusieron. Es recién la guerra mundial de 1914-18, la que muestra las naciones participantes tendidas a un esfuerzo máximo para conseguir la victoria. La guerra se juega en los campos de batalla, en los mares, en el aire, en lo político, económico, financiero, industrial y se especula hasta con el hambre de las naciones enemigas".
(...) "Ya no bastan generales y almirantes geniales, con ejércitos y flotas eficientes para conquistar la victoria. A su lado, los representantes de todas las energías de la nación, tienen un rol importante que jugar en la dirección de la guerra y muchas veces son los que orientan la conducción de las operaciones de las FFAA, pero aun en los años 1914-18, detrás de los ejércitos en lucha, entregadas a un constante esfuerzo para mantener la potencia combativa de las FFAA, vivían en una relativa tranquilidad y bienestar".
(...) "La moral de la nación se mantenía en base de éxitos obtenidos en los campos de batalla, hábilmente explotados por una inteligente propaganda. La actual contienda, con el considerable progreso técnico de la aviación, nos muestra la expresión más acabada de Nación en Armas. Los pueblos de las naciones en lucha, no se encuentran ya a cubierto contra las actividades bélicas, dado que poderosas formaciones aéreas siembran la destrucción siembran la destrucción y la muerte en poblaciones mas o menos indefensas, buscando minar su moral y destruir las fuentes del potencial de guerra de la nación enemiga. El panfleto, toma un lugar importante al lado de las tremendas bombas incendiarias y explosivas, en la carga de los poderosos aviones de bombardeo".
(...) "Un país en lucha puede representarse como un arco con su correspondiente flecha, tendido al máximo que permite la resistencia de su cuerda y la elasticidad de su madero y apuntando a un solo objetivo, ganar la guerra. Sus FFAA están representadas por la piedra o el metal que constituye la punta de la flecha, pero el resto de esta, la cuerda y el arco, son la nación toda hasta la última expresión de su energía y poderío"
(...) "En consecuencia no es suficiente que los integrantes de las FFAA nos esforcemos en preparar el instrumento de lucha ; en estudiar y comprender la guerra, deduciendo enseñanzas de las diferentes contiendas que han asolado al mundo. Es además necesario que todos los intelectos de la nación, cada uno en el aspecto que interesa a sus actividades, se esfuerce también en conocerla, estudiarla y comprenderla , como única forma de llegar a esa solución integral del problema que puede presentársenos y tendremos que resolver, si un día Dios decide que la guerra haga sonar el clarín en las márgenes del Plata".
(...) "La organización de la Defensa Nacional de un país, es una vasta y completa tarea de años y años , por medio de la cual, se han de ejecutar una serie de medidas preparatorias durante la paz, para crear a las FFAA las mejores condiciones para conquistar el éxito en una contienda que pueda suceder; se formularan una serie de previsiones para que la Nación pueda adquirir y mantener ese ritmo de producción y sacrificio que nos impone la guerra, al mismo tiempo que se preverá el mejor empleo a dar a sus FFAA"
(...) "Cualquier país del mundo, grande o pequeño, débil o poderoso, con un grado elevado o reducido de civilización, posee objetivo político determinado. El objetivo político es la necesidad o ambición de un bien, que un Estado tiende a mantener o conquistar, para perfeccionar o engrandecer. El objetivo político puede ser de cualquier tipo; reivindicación o expansión territorial, hegemonía política o económica, adquisición de mercados u otras ventajas comerciales, imposiciones sociales o espirituales, etc. Los objetivos políticos de las naciones son una consecuencia directa del sentir de sus pueblos y debemos recordar que ellos tienen ese instinto seguro, que en la consideración de los grandes problemas, los orientaran siempre hacia lo que más le conviene".
(...) "La verdadera sabiduría de los pueblos y el buen juicio de los gobernantes consiste, precisamente en no fijarse un objetivo político desorbitado, que no guarde relación con la potencialidad de la nación, lo que en caso contrario lo obligaría a enfrentarse con un enemigo tan poderoso que, no solo tendría que renunciar a sus aspiraciones, sino a perder parte de su patrimonio".
(...) "También es verdad que a las naciones les llegan en su historia horas cruciales en las que deben defender su riqueza o su honor, deben sostener la lucha sin esperanza de triunfo, porque como lo enseñaron nuestros padres de la Independencia, "mas vale morir que vivir esclavos". (...) "La diplomacia debe actuar en forma similar a la conducción de una guerra. Como ella, posee sus fuerzas, sus armas y debe librar las batallas que sean necesarias para conquistar los objetivos que la política le ha fijado. Si la política logra que la diplomacia obtenga el objetivo trazado su tarea se reduce a ello y termina allí, en lo que a ese objetivo se refiere. Si la diplomacia no puede lograr el objetivo político fijado, entonces es encargada de preparar las mejores condiciones para obtenerlo por la fuerza, siempre que la situación haga ver como necesario el empleo de este medio político extremo".
(...) "Las naciones tienen la obligación de preparar la máxima potencialidad militar que su población y riqueza permitan, para poder presentarla en los campos de batalla si la guerra llama a sus puertas. Los pueblos que han descuidado la preparación de sus FFAA, han pagado siempre caro su error desapareciendo de la historia, o cayendo en las más abyectas servidumbres. De ellos la historia solo se ocupa de recordar su excesivo mercantilismo o los arqueólogos para explorar sus ruinas, descubriendo bellas muestras de una grandiosa civilización pretérita, que no supo cultivar las virtudes guerrera de sus pueblos. La preparación de las FFAA para la guerra, no es tarea fácil ni que puede improvisarse en los momentos de peligro".
(...) "Adecuada preparación de las reservas . La formación de reservas instruidas, sobre todo, hoy en que los medios de lucha han experimentado tantos progresos y complicaciones técnicas, requiere un trabajo largo y metódico, para que estas adquieran la madurez y el temple que exige la guerra".
(...) "El arte militar sufre tantas variaciones, que los cuadros permanentes del ejercito, deben entregarse a un constante trabajo y estudio, que cuando la guerra se avecina no hay tiempo de asimilar. El militar, junto a su ciencia, debe reunir condiciones de espíritu y carácter de conductor, para llevar a su tropa a los mayores sacrificios y eso no se improvisa, sino que se logra con el ejercicio constante del arte de mandar. Las armas, municiones y otros medios de lucha, no se pueden adquirir ni fabricar en el momento en que el peligro nos apremia, ya que no se encuentra disponibilidad en los mercados productores, sino que es necesario encarar fabricaciones que exigen largo tiempo.
En los arsenales y depósitos, es necesario disponer de todo lo que exigirán las primeras operaciones y prever su aumento y reposición. Las previsiones para el empleo de las FFAA de la Nación, son una larga y constante tarea que requiere de cierto número de jefes y oficiales, estudios especializados, que se inician en las Escuelas Superiores de Guerra y continúan después ininterrumpidamente en una vida de constante perfeccionamiento profesional".
(...) "El conjunto de estas previsiones contenidas en el plan militar, que coordina los planes de operaciones del Ejército, la Marina y la Aviación, se realiza sobre estudios bases que exigen conocimientos profesionales muy profundos. En dicho plan se resuelve la movilización total del país ; la forma en que serán protegidas las fronteras; la concentración de fuerzas en las probables zonas de operaciones; el probable desarrollo de las operaciones iniciales; el desarrollo del abastecimiento de las FFAA de toda suerte de elementos; el desenvolvimiento general de los medios de transporte y de comunicación del país; la defensa terrestre y antiaérea del interior".
(...) "Como podéis apreciar, esta obra realizada en forma completa y detallada, absorbe la labor constante de los organismos directivos de las FFAA de las naciones y de la exactitud de las mismas, depende en gran parte que la lucha pueda iniciarse y continuar luego en las mejores condiciones posibles. Si la guerra, llega será la habilidad y el carácter del Comandante en Jefe y las virtudes guerreras de sus fuerzas, las que trataran de inclinar el azar de la guerra a su favor, y no me refiero a la ayuda de Dios porque ambos contendientes la imploraran con igual fervor. Las FFAA de nuestra Patria, realizan en este sentido una labor silenciosa y constante, que se inicia en cuarteles de las unidades de tropas, buques de la armada y bases aéreas, preparando dentro de sus posibilidades el mejor instrumento de lucha y continua luego en sus institutos de estudios superiores para terminar en la labor directiva de sus Estados Mayores".
(...) "La política interna tiene gran importancia en la preparación del país para la guerra. Su misión es clara y sencilla, pero difícil de lograr. Debe procurar a las FFAA el máximo posible de hombres sanos y fuertes, de elevada moral y con gran espíritu de patria, con la educación necesaria que exige la guerra moderna para manejar armas cada vez más complejas. Con esta levadura, las FFAA podrán reafirmar estas virtudes y desarrollar fácilmente su alto espíritu guerrero y de sacrificio. Es necesario que las calidades antes citadas sean desarrolladas en toda la población sin excepción, dado que es en el interior del país donde las FFAA encuentran su fuerza moral y voluntad de vencer y la reposición del personal, material y elementos desgastados o perdidos".
(...) "Mantenimiento de la moral popular . Los países hoy en lucha, nos muestran todos los esfuerzos que se realizan para mantener en el pueblo, aun en momentos de mayores sacrificios y penurias, la voluntad inquebrantable de vencer al mismo tiempo que se desarrollan todas las actividades imaginables para minar la moral del adversario, naciendo así un nuevo medio de lucha, "la guerra de nervios". Si en cuestiones de gobierno, problemas económicos, sociales, financieros, industriales, de producción y de trabajo, etc. cabe toda suerte de opiniones e intereses dentro de un Estado en el objetivo político derivado del sentir de la nacionalidad de ese pueblo, por ser única e indivisible, no cabe opiniones divergentes. Por el contrario, esa mística común sirve como un aglutinante más, para cimentar la unidad nacional de un pueblo determinado".
(...) "Tregua en las luchas internas . Ante el peligro de guerra, es necesario establecer una tregua en todos los problemas y luchas interiores; sean políticos, económicos, sociales o de cualquier otro orden, para perseguir únicamente el objetivo que encierra la salvación de la Patria: ganar la guerra. Hemos visto como los pueblos que se han exacerbado en sus luchas intestinas, llevan su ceguedad hasta el extremo de declarar enemigos a sus hermanos de sangre y llamar en su auxilio a regímenes o ideologías extranjeras, o se han deshecho en luchas encarnizadas o han caído en el más abyecto vasallaje . Cuando el peligro de guerra se hace presente y durante el desarrollo de la misma, la acción de la política interna de los estados debe aumentar notablemente sus actividades, porque son muy importantes las tareas que le tocan realizar; es necesario dar popularidad a la contienda que se avecina; se debe establecer una verdadera solidaridad social, política y económica, la moral y el espíritu de lucha de la nación toda debe ser llevado a un grado tal que ningún desastre ni sacrificio la pueda abatir; desarrollar en la población un severo sentido de disciplina y responsabilidad individual, para contribuir en cualquier forma a ganar la guerra ; es necesario organizar una fuerte máquina capaz de desarrollar un adecuado plan de propaganda, contra propaganda y censura, que ponga a cubierto al frente interior, contra los ataques que el enemigo le llevara constantemente ; debe aprestarse a la población civil para que se establezca por si misma la defensa antiaérea pasiva en todo el territorio de la Nación, como único medio de limitar los daños y destrucciones de los bombardeos enemigos, etc."
(...) " El caos en las naciones vencidas. Terminada la guerra aún tiene la política interna una ímproba tarea que realizar, especialmente si la misma ha sido perdida. En este momento, parece como si las naciones integras, que han vivido varios años con sus nervios sometidos a una constante tensión, desataran de pronto todos sus instintos y bajas pasiones, creando problemas y situaciones que amenazan hasta la constitución misma de los estados. Rusia y Alemania a la terminación de la guerra 1914-18 constituyen la suficiente demostración de esta afirmación. Esta obra política interna, debe ser realizada desde la paz, en todos los ámbitos. Para lograrla, la inician los padres en los hogares, la siguen los maestros y profesores en las aulas, las FFAA en buques y cuarteles, los gobernantes y legisladores mediante su obra de gobierno, los intelectuales y pensadores en sus escritos, el cine, el teatro y radio en su obra educadora y publicitaria y finalmente, cada individuo de una nación en la formación de su auto formación". (...)
" Problemas internos argentinos . Referido este problema a nuestro caso particular, llegaremos fácil a la comprobación de que requiere un estudio y dedicación muy especial. En nuestra lucha por la independencia y en guerras exteriores que hemos sostenido , sin asumir el carácter de nación en armas que hemos definido, podemos observar grietas lamentables en el frente interno , que nos obligan a ser precavidos y previsores. Posteriormente, hemos ofrecido al mundo un litoral abierto a todos los individuos, razas, ideologías, culturas, idiomas y religiones. Sin duda; la Nación se ha engrandecido, pero existe el problema del cosmopolitismo con que se mantienen dentro de la Nación, núcleos poco o nada asimilados".
(...) "Todos los años un elevado porcentaje de ciudadanos, al presentarse para cumplir con su obligación de aprender a defender a la Patria, debe ser rechazados por no reunir las condiciones físicas indispensables, la mayoría de los casos originados en una niñez falta de abrigo y alimentación suficiente. Y en los textos de geografía del mundo entero se lee que somos el país de la carne y el trigo, de la lana y el cuero. Es indudable que una gran obra social debe ser realizada en el país , tenemos una excelente materia prima, pero para bien moldearla es indispensable el esfuerzo común de todos los argentinos, desde los que ocupan las más altas magistraturas del país, hasta el más modesto ciudadano. La defensa nacional es así un argumento mas, que debe incitarnos para asegurar la felicidad de nuestro pueblo".
(...) " La acción industrial . Ya la guerra 1914-18 nos mostró, y en un grado aun mayor la actual, la importancia fundamental que para el desarrollo de la guerra, asume la movilización y el máximo aprovechamiento de las industrias del país. Conocido es el rol que asumió EEUU en la anterior contienda y en la actual, en que mediante la contribución de su poderío industrial, se convierte en el arsenal de las naciones aliadas, en el máximo esfuerzo por inclinar a su favor la suerte de la guerra. Todas las naciones en la contienda, movilizan la totalidad de sus industrias y tienden con máximo rendimiento hacia un esfuerzo común para abastecer sus FFAA. Es evidente que este cambio, debe ser cuidadosamente preparado desde el tiempo de paz; solucionando problemas tales como el reemplazo de mano de obra, obtención de materia prima, conversión de industrias como consecuencia del peligro aéreo, reemplazo y reposición de lo destruido, etc.".
(...) Abastecimiento de ejércitos en marcha . Durante la guerra es necesario poner en marcha este grandioso mecanismo; regular su producción de acuerdo con las demandas especificas de las FFAA; asegurar los abastecimientos a la población civil; adquirir la producción de materias primas y productos industriales necesarios en los países extranjeros, anticipar y neutralizar las adquisiciones de los enemigos; orientar la acción de destrucción de las industrias enemigas, señalando objetivos a la aviación y al sabotaje, etc."
(...) " Industrialización de nuestro país . Referido el problema industrial al caso particular de nuestro país, podemos decir que constituye el punto crítico de nuestra defensa nacional. La causa de esta crisis hay que buscarla lejos para poder solucionarla. Durante mucho tiempo nuestra producción y riqueza ha sido de carácter casi exclusivamente agrícolas. A ello se debe en gran parte que nuestro crecimiento inmigratorio no ha sido todo lo considerable que era de esperar, dado el elevado rendimiento de esta clase de producción con relación a la mano de obra necesaria. Colmados los mercados mundiales, se limitó la producción, y por ende, la entrada al país de la mano de obra que ella necesitaba. El capital argentino, invertido así en forma segura pero poco brillante, se mostraba reacio a buscar colocación en las actividades industriales, consideradas durante mucho tiempo como una aventura descabellada y aunque parezca risible, no propia de buen señorío.
El capital extranjero se dedicó especialmente a las actividades comerciales, donde todo lucro, por rápido y descomedido que fuese, era siempre permitido y lícito; busco también seguridad en los servicios públicos o industrias madres, muchas veces con una ganancia mínima respaldada por el Estado. La economía del país, reposaba casi exclusivamente en los productos de la tierra pero en el estado más innoble de elaboración, que luego transformaba en el extranjero con evidentes beneficios para sus economías, adquiríamos de nuevo ya transformados.
El capital extranjero demostró poco interés en establecerse en el país para elaborar sus riquezas naturales, lo que significaría beneficiar nuestra economía y desarrollo en perjuicio de los suyos y entrar en competencia con los productos que seguirían allí elaborando. Esta acción recuperadora debió ser emprendida evidentemente por los capitales argentinos, o por lo menos que el Estado los incitase precediéndolos y mostrándoles el camino a seguir".
(...) " Compras bélicas en el extranjero . Para corroborarlo no me referiré más que a un aspecto. Hemos gastado en el extranjero grandes sumas de dinero en la adquisición de material de guerra. Le hemos pagado a siete veces su valor, porque siete es el coeficiente de seguridad de la industria bélica y todo ese dinero ha salido del país sin beneficio para su economía, sus industrias o la masa obrera que pudo alimentar. Una política inteligente, nos hubiera permitido montar las fábricas para hacerlos en el país, las que tendríamos en el presente, lo mismo que una considerable experiencia industrial y las sumas invertidas habrían pasado de una manos a otras, argentinas todas. Lo que digo del material de guerra, se puede hacer extensivo a maquinarias agrícolas, al material de transporte, terrestre, fluvial y marítimo y cualquier otro orden de actividad . Los técnicos argentinos se han demostrado tan capaces como los extranjeros, y si alguien cree que no lo son, traigamos a estos y pronto asimilaremos todo lo que pueden enseñarnos".
(...) " La capacidad del obrero argentino . El obrero argentino, cuando se le ha dado oportunidad de aprender, se ha revelado tanto o más capaz que el extranjero. Maquinarias, si no poseemos en cantidad o calidad suficientes, pueden fabricarse tantas como sean necesarias. A las materias primas nos las ofrecen las entrañas de nuestra tierra, que solo esperan que las extraigamos. Si no lo tenemos todo, lo adquiriremos allí donde se encuentre, haciendo lo mismo que los países europeos que tampoco lo tienen todo. La actual contienda, al hacer desaparecer casi en absoluto de nuestros mercados los productos manufacturados extranjeros, ha vuelto a hacer florecer nuestras industrias, en forma que causa admiración hasta en los piases industriales por excelencia. La teoría que mucho tiempo sostuvimos que si algún día algún peligro amenazaba a nuestra patria, encontraría en los mercados extranjeros el material de guerra que necesitásemos para completar la dotación inicial de nuestro Ejército y asegurar su reposición, ha quedado demostrada como una utopía".
(...) " Debemos poseer la industria propia. La Defensa Nacional exige una poderosa industria propia y no cualquiera sino una industria pesada. Para ello, es indudablemente necesario una acción oficial del Estado , que solucione los problemas que ya he citado y proteja a nuestras industrias si es necesario. No las artificiales que con propósitos solo utilitarios, habrán recuperado varias veces el capital invertido, sino los que dedican sus actividades a esa obra estable que contribuirá a beneficiar la economía y asegurara la defensa nacional. En este sentido, el primer paso ya ha sido dado con la creación de la Dirección General de Fabricaciones Militares, que contempla la solución de problemas neurálgicos que afecten a nuestras industrias.
Al mismo tiempo es necesario orientar la formación profesional de la juventud argentina. Que los faltos de medios o de capacidad comprendan que más que medrar en una oficina pública, se progresa en las fábricas y talleres y se gana en dignidad muchas veces. Que los que siguen carreras universitarias, sepan que las profesiones industriales les ofrecen horizontes tan amplios como el derecho, la medicina o la ingeniería en construcciones. Las escuelas industriales, de oficios y facultades de química, industrias, electrotecnia, etc., deben multiplicarse. La Defensa Nacional de nuestra patria, tiene necesidad de ellos ".
(...) " La acción comercial . El comercio, tanto exterior como interior de cualquier país, tienen una gran importancia desde el punto de vista de la Defensa Nacional. Las naciones en lucha buscan anular el comercio del adversario, no solo para impedir la llegada de abastecimientos necesarios a las FFAA, sino a la vida de la población civil y a su economía. El bloqueo inglés y la campaña submarina alemana, son una demostración en este sentido. Es necesario entonces, estudiar cuidadosamente desde tiempo de paz, condiciones particulares en que el comercio podrá desenvolverse en tiempo de guerra, para desarrollar una política comercial adecuada. En primer lugar, es necesario orientar desde la paz, las corrientes comerciales con los países que más difícilmente podrán convertirse en contendientes en una situación bélica dada, ya que siendo el comercio una de las principales fuentes de la economía y finanzas de la Nación, conviene mantenerlo a su mayor nivel compatible con la situación de guerra. Luego deben estudiarse los puertos por donde saldrán nuestros productos e ingresaran los del extranjero . Se debe determinar cuales son los susceptibles de sufrir ataques aéreos o navales, los que pueden ser bloqueados con mayor facilidad, etc., para saber cuales son los utilizables y las ampliaciones necesarias en sus instalaciones para admitir la absorción de los movimientos comerciales de los otros".
(...) " Estudio de las rutas comerciales . A continuación, habrá que considerar la forma en que dichos productos atravesaran el mar, para asegurarlos contra el ataque naval del adversario. Surge como condición óptima, la necesidad de disponer de una numerosa flota mercante propia y una poderosa marina que la defienda . Se deberá estudiar también, la posibilidad de desviar él trafico de productos a través de países neutrales o aliados, con los cuales los unan vías de comunicación terrestre, como forma de burlar el bloqueo. Análogo estudio deberá efectuarse de los puntos críticos sobre el que reposa el comercio enemigo, para atacarlo y poder así destruirlo, sea mediante el ataque directo o por la competencia de productos similares en los mercados adquisitivos, haciendo jugar todos los resortes que la política comercial posee. Lo manifestado para el comercio marítimo, debe naturalmente, ser extendido a comunicaciones terrestres y fluviales con los países continentales ".
(...) " Posibilidades y desarrollo del comercio interno . Es necesario luego extender las previsiones al desarrollo del comercio interno, asegurando una distribución adecuada, de los productos destinados a satisfacer el abastecimiento de las FFAA y de la población civil, evitando la especulación y el alza desmedida de precios. Las vías de comunicaciones terrestres (FFCC y viales) y las fluviales, deben ser cuidadosamente orientadas por una sabia política que contemple no sólo las necesidades en tiempo de paz, sino también las de guerra en forma similar al comercio marítimo . Además, habrá que considerar las necesidades de las FFAA, no solo para su abastecimiento, sino para movilización, concentración y realización de determinadas maniobras".
(...) "La acción económica. La economía de la Nación, es de importancia fundamental para el desarrollo de la guerra. Las riquezas de la Nación, son llamadas a su máxima contribución para asegurar el éxito de la misma , de calidad y continuidad de producciones existentes dependerá en alto grado la financiación de la guerra. Las posibilidades de comercio exterior, las condiciones particulares de la economía de cada país y el manejo de sus finanzas, requieren la más hábil conducción para evitar la ruina del mismo, a pesar de haber ganado la guerra".
(...) "Los consumos de productos de un país en guerra, asumen cifras fantásticas, y es necesario estimular al máximo la producción de riquezas, a pesar de que la mano de obra, las maquinarias y el utillaje, las fuentes de energía y los medios de transporte, se encuentren ya exigidos al máximo".
(...) " Transformación de la economía nacional . Es necesario, además de estudiar la realización de las propias fuentes de riqueza, coordinarlas con las regiones que se prevea conquistar o perder durante la contienda . Indudablemente, la movilización y transformación de la economía del país, con todos los intereses que habrá que vencer, las formas de explotación muchas veces antieconómicas que será necesario establecer, distribución adecuada de recursos, determinación de las importaciones indispensables y el orden de prioridad a establecer en las mismas, organización del trabajo y empleo del personal, adaptándolo a determinadas actividades, la utilización de los medios de transporte y de comunicación, etc., son tareas muy complicadas. Al igual que las cuestiones analizadas anteriormente, los países desde el tiempo de paz, tratan de someter las economías de los países probables adversarios a ciertos vasallajes y situaciones criticas, preparando verdaderas minas de tiempo que harán explosión en el momento deseado . La transformación que necesariamente debe producirse en las industrias, en la vida agropecuaria y en todos los órdenes de la producción, son de tal naturaleza que, si no se han adoptado con tiempo medidas previsoras, muy graves perturbaciones pondrán en peligro la existencia misma de los Estados. La desocupación y el derrumbe industrial y comercial, han asolado a las naciones beligerantes después de la guerra, cundiendo una desmovilización general y contagiosa".
(...) " La acción financiera . Es indudable que las finanzas sanas, desde la paz, facilitan notablemente la conducción financiera de la guerra. La existencia de reservas metálicas de divisas y un crédito exterior e interior sano, son otros tantos factores de éxito a considerar ".
(...) " Deben adoptarse las previsiones financieras . La financiación de la guerra, solo puede hacerse sobre la base de cuidadosas previsiones, formuladas desde la paz, ajustadas a las más variadas circunstancias que puedan presentarse. Será necesario efectuar una apreciación sobre el probable costo de la guerra, sobre el cual es muy fácil que nos quedemos cortos. En el establecimiento de las inversiones, habrá que extremar todas las medidas existentes, aun coercitivas; movilización de las reservas metálicas y divisas existentes - aportes voluntarios de las reservas metálicas y divisas existentes - del sistema impositivo - de la emisión del papel moneda, etc., sin consideración alguna a los intereses particulares y privados . Será también necesario realizar una guerra implacable a las finanzas de las naciones adversarias, especialmente atacando su crédito, su moneda y su sistema impositivo. Será también necesario estudiar la contribución económica y financiera que se impondrá a la nación vencida y la forma de pagar la deuda de guerra en caso de derrota".
Juan Domingo Perón
Universidad Nacional de La Plata, 10 de Junio de 1944
Fuente: http://www.causanacional.com.ar/Nuestro_pais_esta_inmerso.html